En nuestro recorrido por el mundo naturista, alguna vez adquirimos un artefacto artesanal para producir plata coloidal en agua destilada. El producto lo usamos en la familia para combatir algunas enfermedades de origen bacteriano y viral. No era algo mágico, pero tanto nuestra sobrina Lorca como nosotros experimentábamos bienestar con su uso, a un precio ridículo. Ahora la plata coloidal vuelve a estar de moda para prevenir el AH1N1. Lamentablemente, Carmen, se deshizo del artefacto, y por supuesto, ahora vale más y tal vez es un poco más complicado conseguirlo.
Sin embargo, “por si las moscas atacan” hemos ordenado por internet dos productos para mantener o mejorar nuestra salud. Uno de ellos, un desintoxicador oral de metales, y el otro “lo último en lo avenida” en cuanto a plata coloidal. Según el biólogo mejicano, José Luis Ramírez Woolrich, “Desde hace siglos se sabe, pero desde principios del siglo XX se demostró científicamente que ningún microorganismo, ninguna bacteria, virus, hongo, levadura, moho o microbio puede vivir en un líquido en el que haya una sola partícula de plata.” De ahí, que, “se considere uno de los más potentes y eficaces germicidas naturales conocidos y se le otorgue la denominación de súper-antibiótico.”
Como fieles creyentes en la medicina alternativa estamos a la espera de nuestro nuevo Total Body Detox Kit que incluye el ACS y el ACZ. Luego de nuestra investigación cibernética encontramos que estos son los mejores en su género. Después de todo, si no nos sirven para una cosa nos servirán para otra. “Ya veremos”.
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