¿Qué tipo de virus es?
- Se trata de un patógeno del tipo H1N1, pero nunca antes detectado: tiene componentes porcinos, aviares y humanos.
¿Cómo se contagia?
- Se contagia de humano a humano por las vías aéreas, como la gripe estacional, no sólo por contacto con cerdos.
¿A quién afecta?
- A diferencia de otras gripes, más grave en niños y ancianos, la porcina también afecta a adultos sanos.
¿Cuándo se manifiesta?
- El período de incubación del virus es de alrededor de cuatro o cinco días, y se manifiesta con síntomas parecidos a los de la gripe.
¿Qué síntomas tiene?
- Fiebre por encima de los 39 grados, tos, dolor de cabeza, dolor muscular, falta de apetito y náuseas y congestión nasal.
¿Se puede viajar?
- Los viajeros a zonas afectadas deben tomar medidas: extremar la higiene, usar pañuelos desechables, evitar tocarse boca, ojos y nariz y vigilar su salud después del viaje.
¿Tiene cura?
- Hasta ahora, el antigripal Tamiflu (oseltamivir) ha sido efectivo para prevenirlo y combatirlo. Otros fármacos son ineficaces, por lo que hay riesgo de que también desarrolle resistencia a éste.
En los germinados, la vida está presente con toda su fuerza, son ricos en sustancias de gran valor biológico necesarias para nuestro organismo como las vitaminas y las enzimas.
Los germinados poseen unos contenidos nutritivos extraordinarios, pues en ellos está toda la futura planta en potencia. En la germinación se producen una serie de transformaciones bioquímicas, entre las que destaca el espectacular aumento de contenido vitamínico. Además contienen proporcionalmente pocas calorías, por lo que se recomiendan en dietas antiobesidad y adelgazamiento.
Tienen propiedades medicinales, ya que estimulan los procesos digestivos, regeneran la flora intestinal y son antioxidantes, depurativos y remineralizantes.
En los germinados aumenta sensiblemente el contenido de ADN y ARN (moléculas del núcleo celular que son portadoras del patrimonio genético de los seres vivos). Esto explica las facultades regeneradoras y revitalizadoras de los germinados.
Están predigeridos, por lo que son fáciles de digerir y se asimilan muy bien. Las enzimas que se sintetizan durante la germinación comienzan la digestión del almidón, las proteínas y las grasas depositadas en la semilla. Es un proceso químico similar al que ocurre en nuestro organismo durante la digestión. Por lo tanto, y como hemos comentado anteriormente son muy digestivos y fácilmente asimilables.
Son muy sencillos de preparar, ya que se comen tal cual, crudos en ensalada o formando parte de diversos platos cocinados.
Os aconsejamos su consumo con ensalada, como primer plato. Comer alimento vivo al inicio de las comidas es muy recomendable y ayuda al proceso digestivo.